sábado, 21 de abril de 2012

Accidente mortal cerca de La Horra, en la carretera Aranda-Palencia

FUENTE INFORMATIVA: Diario de Burgos.es (del miércoles 28 de marzo de 2012)

Ribera
La Horra / Sucesos

Fallece en accidente de tráfico un guardia civil gijonés destinado en Roa

El siniestro tuvo lugar en el kilómetro 57,100 de la CL-619 el lunes por la noche al impactar su automóvil contra un camión que realizaba una maniobra antirreglamentaria y cuyo chófer ha sido detenido por conducción temeraria
DB / La Horra - miércoles, 28 de marzo de 2012
El turismo se encontró cruzado en mitad de la carretera un
 tráiler que realizó una peligrosa maniobra en este cruce de
 caminos para cambiar de sentido. FOTO: DB
El siniestro tuvo lugar en el kilómetro 57,100 de la CL-619 el lunes por la noche al impactar su automóvil contra un camión que realizaba una maniobra antirreglamentaria y cuyo chófer ha sido detenido por conducción temerariaEl guardia civil Enrique Lorenzo, de 32 años de edad, natural de la localidad asturiana de Gijón y destinado en el puesto de Roa de Duero, falleció el pasado lunes por la noche a consecuencia un espectacular accidente de tráfico en el que se vieron implicados un turismo y un camión ocurrido en la CL-619 (Magaz de Pisuerga (Palencia)-Aranda de Duero) en el término municipal de La Horra.

El siniestro se produjo sobre las 23:00 horas a la altura aproximada del kilómetro 57,100, en un punto situado a poco más de medio kilómetro de la rotonda de acceso a la villa horrense y en torno a un kilómetro del cruce para ir a Olmedillo de Roa. El turismo particular en el que viajaba en solitario en sentido Aranda de Duero el agente, que no estaba de servicio y regresaba a Roa al parecer desde Asturias donde había ido a llevar a sus padres que habían pasado unos días con él en la Ribera, se encontró de repente, en un tramo recto pero situado a apenas 125 metros de un cambio de rasante, con un camión articulado realizando una temeraria maniobra antirreglamentaria.

Al parecer el chófer del tráiler, que circulaba en sentido Palencia debió confundirse en la ruta y aprovechó la existencia de la entrada de un camino rural, ubicado en pleno monte, para cambiar de sentido, con tan mala suerte de que el Volkswagen Golf que conducía la víctima se lo topó de frente y prácticamente sin capacidad de reacción cruzado lateralmente a lo ancho de la carretera.

El turismo pasó entre el hueco existente entre las ruedas traseras de la cabeza tractora y los ejes del remolque pero las vigas metálicas inferiores actuaron como una guadaña descapotando por completo el coche y segando, literalmente, al instante la vida del agente.

Alertada del accidente, la sala de operaciones del 112 dio aviso del incidente a los bomberos del Parque Municipal de Aranda de Duero y a los voluntarios de Roa, a la Guardia Civil de Tráfico y a Emergencias Sanitarias -Sacyl, que envió una UVI-Móvil. Ya en el lugar de los hechos los facultativos del Sacyl tan solo pudieron certificar el fallecimiento del único ocupante del turismo.

Moldavo
La Guardia Civil, que al tratarse de un compañero desplazó a numerosos efectivos hasta el lugar, donde por cierto se vivieron momentos de gran tensión, procedió a detener de inmediato al conductor del camión como presunto autor de un delito de conducción temeraria. Un chófer del que no ha trascendido su filiación, más allá de que podría ser de nacionalidad moldava e iba acompañado en la cabina por una mujer. Se da la circunstancia de que ni el camión, un DAF XF de matrícula española, ni el remolque lucían indicativos de ninguna empresa concreta.

Todos los testigos del siniestro calificaban de «dantesca» la impactante imagen del accidente y aseguraban que era una de las más duras de las que se han encontrado en mucho tiempo. El turismo quedó convertido en un auténtico amasijo de hierros y la intervención de los bomberos se prolongó por espacio de casi dos horas para tratar de recuperar el cadáver.

El coche permanecía ayer en el taller mecánico de la capital ribereña a donde fue retirado por la grúa tapado con una lona por orden judicial a la espera de que una funeraria burgalesa se desplazara a finalizar la labor de levantamiento de los restos.